Etiquetado: MERCADO DE TRABAJO
BUSCARSE LAS HABICHUELAS … ¿TODO VALE?
Hoy ha llegado a mis manos un folleto de colores en el que veía fotos de unos planos y un largo listado de precios y ofertas especiales, en principio pensaba que se trataba de la publicidad de una empresa de fotocopias o de consumibles, pero justo antes de arrugarlo leo … «Cédulas de habitabilidad desde 75 €», sigo leyendo y veo «proyectos de apertura desde 290 €»…. vuelvo a mirar y compruebo que se trata nada más y nada menos que UNA CONSULTORÍA DE ARQUITECTURA E INGENIERÍA !! Entre cabreado y sorprendido consulto la página web que se cita en el cutre folleto y la frase que leo al más puro estilo Carrefour termina de machacarme «…Igualamos y mejoramos cualquier presupuesto…» .
Queda claro que la sociedad en general ha perdido el respeto por nuestra profesión, que en determinados sectores se nos considera como «los que hacen los «papeles» para la licencia»; es evidente que si nos dedicamos al urbanismo, en algunos ámbitos se nos considera directamente sospechosos de corrupción; pero el problema no es la sociedad, no son los sectores críticos, el problema lo tenemos en casa con este tipo de «profesionales» y lo pongo entre comillas claramente por lo siguiente:
Olvidemos que para poder firmar un proyecto de apertura hay que haber estudiado muchos años, mucho esfuerzo y mucho dinero invertido; todo eso lo olvidamos, lo regalamos altruistamente y empezamos con el proyecto de apertura: habrá que medir «in situ», habrá que hacer un plano, habrá que hacer una memoria, habrá que calcular algunos detalles, habrá que echarle tóner a la impresora, habrá que pagar el despacho, la luz, el agua, el teléfono, el ADSL, el colegio, la Mutua, el seguro de responsabilidad civil (el de este año y el de los 10 siguientes), habrá que desplazarse al local…… y al final de todo esto la gran recompensa, 290 € con los que al menos puedo pagar alguna de las púas de este mes…..
Está claro que cada uno es libre para buscarse las habichuelas como mejor entienda que debe hacerlo, pero me planteo dos preguntas:
– ¿Tan ciegos estamos que no nos damos cuenta de que estamos preparando nuestra propia tumba? Esos precios no cubren ni siquiera los gastos de Seguro de Responsabilidad Civil ¿Qué hacemos entonces? ¿Lo hacemos sin seguro? ¿Pagamos por trabajar?. ¿Cómo coño queremos que se respete nuestro trabajo si nosotros mismos decimos que no vale nada?.
– La teórica rigidez de los baremos de honorarios mínimos quedó atrás hace ya muchos años y queda muy bien hablar de que en el mercado de trabajo la profesionalidad y el buen hacer serán los que pongan precio a nuestros encargos, pero falla el origen, simplemente no hay mercado y no sólo por la brutal crisis del sector sino por la presencia de estos personajes. ¿No ha llegado la hora de reconsiderar si fue un error eliminar los baremos? ¿No deberían nuestros colegios velar de alguna forma por el mantenimiento de ese mercado?.
Sólo un mensaje para los partidarios de este tipo de folletos: con este tipo de desarrollo de negocio el nivel de ingresos del Arquitecto se iguala o queda por debajo del de muchos y muy respetables trabajos como el de camarero, operario de fábrica o dependiente; con una pequeña diferencia, el camarero, el operario y el dependiente a las 20.00 cierran y se van a casa a dormir, en verano y en Navidad tendrán su extra y sus vacaciones; mientras por el mismo precio tú te llevarás los problemas a casa, no tendrás vacaciones ni extras y encima serás el responsable de lo que has hecho durante 10 años….. ¿No es absurdo?