PAISAJES NOCTURNOS
Cae la noche en la ciudad, la monotonía, la desconexión con el lugar y los miedos se acentúan; paisajes que durante el día eran banales y aburridos bajan al escalón inferior. Farolas que estén donde estén tan sólo se diseñan para el cumplimiento de la normativa de aplicación; tanta sección de calle, tanta altura de farola, tantos lúmenes…. catálogo e iluminación diseñada; acabamos de crear o al menos condicionar el paisaje que podremos ver durante muchas horas cada día ¿hemos aportado algo además de iluminación? en la inmensa mayoría de nuestras ciudades la respuesta es negativa.
¿Por qué no aprovechamos oportunidades? El sol y la luna están donde tienen que estar y nosotros no podemos intervenir en su inclinación o intensidad, pero no es así cuando hablamos de iluminación, por lo tanto tenemos la herramienta perfecta para potenciar un recorrido, realzar un edificio, esconder lo que no nos interese que se vea, crear sensaciones cinéticas o estáticas; en definitiva incluso ciudades, barrios o recorridos que durante el día nos aburran pueden transformarse plenamente con la llegada de la noche y pasar a ser un magnífico paisaje que despierte nuestros sentidos, nos invite a recorrer, a descubrir y a conocer. ¿Cuál es la diferencia entre ambas opciones?…. bajo mi punto vista no es económica, la causa es la de siempre, conformismo y vagancia intelectual; por tanto invirtamos la tendencia y trabajemos, los resultados de nuestro trabajo son sin duda nuestra mejor herramienta de sensibilización, empleémonos a fondo y a la vista de lo que podemos hacer, el brutal esfuerzo que hoy día necesitamos para convencer irá disminuyendo, estoy convencido.
Poco espacio para el espectáculo mas maravilloso, que es el firmamento negro salpicado por estrellas….